Con el objetivo de fortalecer y actualizar a sus trabajadores administrativos y manuales para que sean capaces de enseñar las medidas de seguridad en caso de un accidente, así como el cuidado de la salud, la Universidad Autónoma de Yucatán impartió el curso de “Seguridad, Higiene y Salud Laboral”.
Un total de 103 trabajadores sindicalizados de diferentes dependencias tomaron este curso, impartido por el CD Johnny Granados Balam, en él, los asistentes adquirieron la experiencia necesaria para prevenir accidentes laborales y mejorar el cuidado de la salud tanto en el trabajo como en su hogar.
Durante su discurso, el rector José de Jesús Williams, afirmó que el personal de la Universidad es ejemplo de responsabilidad social, contribuyen a la transformación de entornos, generan conocimientos y competencias que ayudan al estudiante en sus estrategias de aprendizaje.
“Nuestra función, tarea y responsabilidad como universidad pública, está estrechamente relacionada con la formación de jóvenes, tanto de bachillerato, como de licenciatura y posgrado, pero, sobre todo, en la formación de personas. Esto no se logra solamente con los académicos, sino también con la gran participación de todos ustedes los trabajadores”, enfatizó.
Resaltó que el curso forma parte del Plan de Desarrollo Institucional (PDI) 2014-2022, el cual se fortalece gracias a sus trabajadores, esto con el único fin de mejorar sus capacidades, con base en las responsabilidades que tienen en sus centros de trabajo.
“Estos cursos han mejorado el ambiente laboral, así como el compromiso y la responsabilidad con la Institución”.
El Rector subrayó que la UADY va por buen camino en cuanto a la implementación de las normas básicas de seguridad e higiene, así como de salud laboral en todo el personal, “es necesario y fundamental que todos estén informados en temas que son prioritarios en la vida diaria, es así como se podrían desempeñar adecuadamente en caso de algún accidente en su hogar o trabajo”.
Por último, la Secretaria General de la AUTAMUADY, Sofía Ayil Sierra calificó el curso y las acciones que la Universidad realiza como un acierto de la actual administración.
“Es importante que día a día nos capacitemos y que se cuiden estos detalles de la seguridad y la higiene en el trabajo. Es importante recalcar, que los trabajadores muestran mucho interés hacia este tipo de cursos, y gracias a la administración del Dr. Williams, ellos han tenido la oportunidad de capacitarse continuamente en diferentes temas”, puntualizó.
Nota del Diario de Yucatán (5 de junio de 2018)
Del liderazgo de Sofía Ayil Sierra, la Asociación de Trabajadores Administrativos y Manuales de la Uady vive su mejor momento en sus 44 años y en dos períodos logró la actualización de 49 cláusulas del Contrato Colectivo de Trabajo, algo que jamás habían logrado otros secretarios generales del sindicato.
Otro precedente que logró la maestra en Derecho Laboral fue la primera huelga prolongada contra la Uady en 2015, un movimiento que sacudió a la élite universitaria, trabajadores, sociedad y justicia laboral.
Entrevistada con motivo de su reelección para un tercer y último período de dos años, la maestra Ayil Sierra también diferencia el trabajo sindical de la Autamuady con el de la Apauady (sindicato de maestros que afronta severa división por presuntos malos manejos de recursos).
En primera instancia destaca que la estructura de la Autamuady es muy diferente al otro sindicato. El que ella encabeza tiene como órgano máximo una asamblea democrática donde todos tienen voz y voto.
Se trata de un órgano colegiado masivo que decide lo que se tiene que hacer, le rinde un informe financiero y de actividades, publica en su gaceta informativa el movimiento económico y aclara las dudas que se presenten.
Además, en la Autamuady el secretario general sólo puede permanecer seis años como máximo. Cada período es de dos años y se somete a votación si permanece o no en el cargo en cada plazo.
“La huelga de 25 días nos impulsó y nos dio respeto ante las autoridades”, comenta Sofía Ayil. “A raíz de esa huelga aprendimos a trabajar con la universidad siempre buscando el diálogo, no la confrontación y nos ha funcionado”.
“En cuatro años logramos la modificación de 49 cláusulas a favor de los trabajadores. No hemos tenido ningún retroceso, al contrario, logramos prestaciones que mis antecesores habían añorado y que hoy son una realidad. Por ejemplo, el servicio médico vitalicio para las viudas, antes sólo te daban el servicio de acuerdo con la antigüedad del trabajador, ahora es vitalicio, es un gran logro”.
Otros logros en su gestión son la actualización de montos en las becas, vales de despensa, ayuda de renta, ayuda de transporte y el establecimiento de un bono escolar único, una prestación nueva que con el paso de los años mejorará.
“Siempre estamos buscando el beneficio de los agremiados y hemos avanzado en muchas cláusulas que no se había podido mover. Mi reelección significa mucha responsabilidad, tengo deseos de dejar el mejor legado para el sindicato y por deseos de servir no pararé”.
Ella reconoce que no es fácil conciliar los intereses y lograr la unidad plena porque la Autamuady tiene 789 trabajadores registrados en el padrón de la Junta de Conciliación y Arbitraje y una bolsa de trabajo de 286 personas.
Aunque siempre trata de lograr consensos, de permitir la expresión de opiniones y de tomar las críticas positivas, rendir cuentas claras y organizar eventos para la integración sindical y familiar, explica. Ahora mismo está en plena organización del torneo de pesca 2018, donde participarán 28 lanchas con equipos de seis personas cada una. (Continuará).— Joaquín Chan Caamal
Ella dice que una de las ventajas de las asambleas democráticas de su sindicato es que si trabajas bien, te manifiestan su apoyo, si trabajas mal, ellos mismos te separan. Además, como son asambleas participativas, los afiliados te dicen hacia dónde irás, no se hace nada si la asamblea no lo aprueba.
De hecho, en cada revisión o decisión la asamblea se entera primero, aprueba el proyecto y después se negocia. No se toman decisiones personales, sino colectivas.